Ultra cavitación y Radiofrecuencia.
La ultracavitación es un tratamiento estético no invasivo que utiliza ondas de ultrasonido de baja frecuencia para la reducción de grasa localizada. Este procedimiento induce la formación de microburbujas en el tejido adiposo, las cuales implosionan y provocan la ruptura de las células grasas. Los ácidos grasos liberados son posteriormente eliminados a través del sistema linfático y urinario. Este método ha demostrado ser eficaz en áreas específicas como el abdomen, los muslos y los glúteos.
En contraste, la radiofrecuencia emplea energía eléctrica de alta frecuencia para calentar las capas profundas de la dermis. Este calentamiento promueve la síntesis de colágeno y elastina, mejorando así la textura y la firmeza de la piel. Además, contribuye a la reducción de la celulitis y a la reafirmación de zonas como el rostro, el cuello y los brazos. Los resultados son visibles de manera inmediata, aunque se recomienda un enfoque continuo para alcanzar resultados sostenibles a largo plazo.
Ambos tratamientos son considerados seguros y efectivos, y su eficacia se potencia al ser combinados con una dieta equilibrada y un régimen de ejercicio regular.
Cavitación:
Se limpia la zona a tratar para asegurar una piel libre de aceites y cremas. Se aplica un gel conductor en la superficie de la piel. Se utiliza un dispositivo que emite ondas de ultrasonido de baja frecuencia. Las ondas ultrasónicas generan microburbujas en el tejido adiposo, rompiendo las células de grasa. Los ácidos grasos liberados se eliminan a través del sistema linfático y urinario.
Radiofrecuencia:
La piel se limpia y se prepara adecuadamente. Se aplica un gel conductor o una crema específica en la zona a tratar. Un dispositivo de radiofrecuencia emite energía de alta frecuencia que penetra en las capas profundas de la piel. El calentamiento de estas capas estimula la producción de colágeno y elastina. Mejora la firmeza y la textura de la piel, reduciendo la apariencia de la celulitis. En ambos tratamientos, es crucial seguir las recomendaciones del profesional para obtener los mejores resultados y mantener una dieta saludable y un régimen de ejercicio regular.
La duración de este tratamiento es de unos 3-6 meses.